Las tarjetas de visita tienen presencia en la historia, en el siglo XV en China y posteriormente en Europa en el siglo XVII y con el tiempo llegaron a ser comunes entre la aristocracia de Europa y América.
De hecho, la realeza y la aristocracia hacia entrega de las tarjetas de visita a los criados de sus futuros anfitriones, anticipando así su visita y haciendo posible se cumpliesen con el protocolo de recibirlos.
Origen burgués de las tarjetas de presentación.
Dado que el procedimiento dependía de la existencia de criados, esta práctica se convirtió en una práctica de las clases pudientes. Las tarjetas de visita se convirtieron en un instrumento indispensable de etiqueta, con un protocolo que debía ser cumplido.
La norma social esencial era que una persona solo podía visitar a otra, sí antes presentaba su tarjeta de visita en el hogar al cual aspiraba entrar, lo que implicaba una solicitud de que fuese recibido.
Luego de entregar la tarjeta (a través de un intermediario: su criado), ésta era recibida por el criado del hogar que aspiraba visitar y debía esperar una señal de que su llegada fuese aceptada y bien recibida.
A modo de respuesta debía esperar una tarjeta en su propio hogar, en señal de que sería bienvenido. O también podía recibir una tarjeta en sobre, lo cual era un indicador desalentador.
Tarjetas de visita en la actualidad
La tarjeta de visita y sus formas de uso, socialmente ha cambiado con el tiempo pues se ha generalizado su uso entre las diferentes clases sociales y cumple mas una función de presentación pues incluye detalles de la persona, su dirección e incluso número telefónico.
En la actualidad, las visitas no tienen el carácter protocolar de otros tiempos.
Son mas espontáneas y en algunas partes del mundo se utilizan otras vías para acordar las visitas como puede ser el teléfono o cara a cara.
En otras partes del mundo se sigue utilizando. Es luego de la visita, el anfitrión entrega su tarjeta impresa con sus datos en señal de que será de nuevo bienvenido.
Allí por supuesto puede darse un intercambio de tarjetas pues el anfitrión espera una invitación en reciprocidad.
Útil con distintos propósitos
En la actualidad una tarjeta de visita, es utilizada también para las épocas de festejos, navidad, año nuevo, matrimonio junto al regalo, así como en el caso de los cumpleaños.
Sin embargo, el rol más importante que ha adquirido la tarjeta de visita es el ámbito profesional y de los negocios pasando a cumplir el rol de una carta de presentación.
Se entrega la tarjeta de visita a la persona que nos recibe. De esta manera se asegura que no se olvidará de nuestro nombre y sí requiere contactarnos tendrá nuestros teléfonos.
Profesional ante todo
Entre otros aspectos, las tarjetas de visita en el ámbito profesional y empresarial sirven para proyectar la imagen del profesional, si se es independiente, además la profesión y por supuesto teléfono y correo electrónico.
Sí se trata de que somos representantes de una empresa, deberá llevar el logo de la misma, datos como correo electrónico, web si lo tuviera y redes sociales.
Por supuesto el nombre de quien en ese momento presenta la tarjeta.
De esta manera se convierten en una herramienta de promoción para la empresa.
Sirven para reflejar la información más relevante de tu negocio y se les entrega a tus clientes para facilitar que se pongan en contacto contigo.
Entre los elementos que deben incluirse en la Tarjeta de Visita personal están el logo de la compañía, que debe proyectar la imagen corporativa. Así como lo parte de los servicios que ofrece la empresa.
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